miércoles, 19 de septiembre de 2012

SEGURIDAD ALIMENTARIA



“Denles ustedes de comer”
Lc 9, 11-17

Equipo de Facilitadores
Departamento de Agricultura Sostenible
Medio Ambiente y Agua




“Yahvé, tu Dios, va introducirte en esta tierra buena, tierra de arroyos y de vertientes…, tierra de trigo y de cebada, de viñas e higueras, de granados y olivos, tierra de aceite y miel. Tierra donde el pan que comas no será racionado y donde nada te faltará… comerás hasta saciarte y bendecirás a Yahvé por el buen país que te dio”
Dt. 8, 7-10


El Departamento de Agricultura Sostenible, Medio Ambiente y Agua, ha iniciado el proceso de acercamiento a las parroquias San Pedro Apóstol y San José, del municipio de San Pedro Perulapan y la Parroquia San José del municipio de San José Guayabal, por medio de la motivación, sensibilización y  diagnostico de la realidad productiva, estado de los suelos, usos de recursos, etc. de las comunidad en coordinación con la estructuras pastoral de cada una de las Parroquias.

Este acercamiento a las comunidades y conocer de cerca la realidad que viven las familias campesinas, nos han ayudado a definir los objetivos del proceso a seguir que ayude a mejorar la conservación, fertilidad natural de los suelos, diversificación productiva, uso de las semillas criollas, etc.; que posibiliten una mejora significativa en la calidad de vida de  las familias beneficiarias.

El proceso de seguridad y soberanía alimentaria, que hemos iniciado vendría a beneficiar 285 familias de las cuales, 90 son de las comunidades Tecoluco, Fátima y San Diego de la Parroquia San José; 70 familias son de las comunidades  San Francisco Asís, San Francisco Candelaria, Tecomatepe La Paz y Tecomatepe La Cruz, de la Parroquia San Pedro Apóstol (ambas parroquias del Municipio de San Pedro Perulapan) y 125 familias beneficiarias de las comunidades Los Rodríguez, Meléndez y Ánimas de la Parroquia San José (Guayabal).

Las familias serán beneficiarias a través de los proyectos “Seguridad y Soberanía Alimentaria y Nutricional, en Cinco Comunidades Rurales del Municipio de San Pedro Perulapan”. Financiado por la Iglesia Católica Irlandesa a través de su agencia de cooperación TROCAIRE y el proyecto Seguridad Alimentaria, una estrategia vinculada a la gestión integral del riesgo financiado por la Iglesia Católica Noruega a través de la Caritas Noruega.

Ambos proyectos,  van dirigidos a implementar intervenciones de fortalecimiento de capacidades, apoyo a iniciativas productivas, organización comunitaria e incidencia, promoviendo la participación de campesinos/as y pequeños productores con un enfoque de derechos orientados hacia la soberanía alimentaria y la disminución de vulnerabilidades; como marco de trabajo en la búsqueda de alternativas de desarrollo  solidario, atendiendo las poblaciones vulnerables en los municipios priorizados.

Estos se enmarcan en el planteamiento estratégico del trabajo; “Impulsar un modelo de Agricultura Sostenible, que bajo un enfoque gradual de agroecología contribuya a garantizar la seguridad y soberanía alimentaria de las familias rurales.”  La prioridad sería apoyar las iniciativas agropecuarias que se generen con los productores/as, para  asegurar la alimentación familiar a partir del fortalecimiento y potenciación de los recursos locales, a través del rescate y valoración del conocimiento campesino local desde el Desarrollo de Capacidades humanas, fomentando el rol primordial que tienen los agricultores y agricultoras de los grupos comunitarios en el impulso de proceso de transformación de las condiciones de producción. Y considerándolos como promotores comunitarios voluntarios. “El actor fundamental de este proceso”, ya que ellos son los que a partir de su experiencia de generar los espacios de coordinación comunitaria, procesos de integración familiar,  intercambios, promoción, etc. y son los que le darán sostenibilidad al proceso. 


En tal sentido consideramos esencial en continuar fortaleciendo los procesos de participación ciudadana y el Desarrollo de Destrezas y Habilidades. Técnicas que llevan a mejorar las condiciones para la  producción de alimentos en las familias participantes en el proceso. Se tiene suelos con condiciones desfavorables para la diversificación productivas en granos básicos, huertos y en la producción vegetal para la integración de las especies menores debido a las prácticas actuales de manejo agronómico de los cultivos.

El objetivo general que orienta el proceso es, Promover el desarrollo humano social y sustentable de los  productores de las comunidades más vulnerables, a través de la organización y el fortalecimiento de las capacidades para la participación y la gobernanza desde una perspectiva de equidad e igualdad. Y los objetivos Específicos consiste en:
· Impulsar el empoderamiento local y la organización comunitaria como base estratégica para fomentar la agricultura sostenible y la gestión de riesgo.
· Contribuir y promover la seguridad alimentaria y la soberanía alimentaria de las poblaciones más vulnerables en El Salvador.
·  Fortalecer la organización y la articulación en redes de los  productores agrícolas y pecuarios tradicionalmente marginandos para la gobernanza en Seguridad Alimentaria.

La metodología a implementada es la de “campesino a campesino” y la estrategia de intervención parte de lo sencillo a lo complejo, poniendo énfasis en los pequeños pero significativos aprendizajes que se vayan teniendo –productor/a y técnico/a – a fin que los resultados parciales permitan avanzar de forma cualificada a experiencias más amplias como, la manera de minimizar posibles eventualidades, no poniendo en riesgo la seguridad alimentaria de la familia. Por ello la experimentación en áreas pequeñas, controlables es la garantía del empoderamiento posterior.

Esta estrategia se enfoca en  la construcción de aprendizajes y concepciones  que se  realizan directamente en el proceso de producción. Este enfoque parte de la premisa que toda acción tecnológica o de intervención en el sistema productivo campesino, por muy sencilla que parezca lleva en su interior un mensaje, un principio, un valor que debe ser coherente con los objetivos del modelo de agricultura sostenible. La aplicación de dicha acción debe conducir a un proceso de reflexión, de allí la coherencia entre lo que, se predica y lo que se hace. La construcción de conciencia social debe tener como respaldo la acción práctica de transformación de la parcela.

La metodología de “aprender haciendo” es reconocida como la mejor estrategia para la educación de adultos. Esto también significa la desmitificación de la figura del técnico, como “el que lleva el conocimiento” y generosamente lo “imparte”, para  transformarse en un facilitador que está atento a propiciar el descubrimiento conjunto de aprendizajes a partir de las prácticas concretas en el sistema productivo agroecológico. La forma de abordaje o intervención con las familias rurales, debe estar en relación con: Los recursos, vocación de los productores y ubicación geografía.

La estrategia de implementación del modelo de agricultura sostenible debe evitar por todos los medios la replicación mecánica de experiencias exitosas de un lugar a otro, sin antes haber analizado y conocido las condiciones geográficas, climáticas, recursos potenciales, aspectos sociales y culturales de la comunidad donde se está trabajando.

El abordaje de las diferentes variables que conforman la realidad comunitaria es determinante para decidir las etapas del proceso, así como el tipo de tecnología, material vegetativo, etc., que podría aportar sostenibilidad sin que encuentre obstáculos referidos a una mala evaluación de las condiciones de campo.

Para que este proceso sea sostenible, es necesario potenciar el crecimiento de  la comunidad a partir de las experiencias ejemplares con alto uso de recursos locales; no con base a la asignación de recursos externos que vuelven dependientes a los sistemas productivos. De antemano se sabe que la  transferencia de activos materiales no es sostenible mucho menos auto reproducible en las comunidades. La insostenibilidad se da por el deterioro natural de los activos (depreciación), la cual demanda generar acumulación para su posterior remplazamiento, para poder generar acumulación es necesario vincularlas al mercado. De allí que muchas visiones de desarrollo rural (y sus respectivos proyectos) mantienen el componente de comercialización, y no buscan la seguridad alimentaria de las familias.
 
Al realizar transferencias intrínsecamente se les dice a las comunidades que no existe otra alternativa para alcanzar la autonomía alimentaria y se está profundizando los niveles de dependencia. La mal llamada revolución verde, es el mejor ejemplo, actualmente el 99% de la producción agropecuaria salvadoreña depende de la importación de insumo químico, que no se produce en el país. Por tanto, la identificación y sistematización de experiencias ejemplares, las cuales se basen en el uso de conocimientos y técnicas locales es una estrategia que cumple con los principios de fácil adopción, uso de conocimiento local y de auto replicación.

Este proceso humano, técnico, metodológico, y ecológicamente viable, fácilmente adaptable y auto reproducible, no se basa solamente en corrección o abstinencia del uso de tecnologías, material genético o prácticas en general que conlleven al desequilibrio del ecosistema: suelo, aire, seres vivos, agua, etc. Si no también incluye el reto conjunto entre comunidades por la transformación del paisaje agropecuario en sistemas productivos capaces de reproducir –lo más cercano posible- los atributos característicos de los ecosistemas naturales; a fin de garantizar sustentabilidad, estabilidad y resiliencia de dichos sistemas en el tiempo y con ello reduzca la vulnerabilidad de manera directa de las 285 familias beneficiarias del proyecto, y de las 5,363 personas que de manera indirecta se vendrían a beneficiar con este proceso.

Hemos de dejar en evidencia nuestros agradecimientos por el apoyo este proceso de el Padre Ricardo Arcega Rabadán, de la Parroquia San Pedro Apóstol, Padre Jhon Fredy Caro Pérez de la Parroquia San José (San Pedro Perulapan) y del Padre Jerónimo Francisco Cucufate Portillo de la Parroquia San José (San José Guayabal), así como de los agentes de Pastoral de cada una de las comunidades y elevamos nuestras oraciones a favor de esta obra por medio de la intercepción de San Isidro Labrador, patrono de los agricultores y agricultoras.

ORACIÓN DE SAN ISIDRO LABRADOR

Señor y Padre Nuestro, en la humildad y sencillez de San Isidro, el labrador, nos dejaste un ejemplo de vida unida a Cristo y escondida en ti; te pedimos que el trabajo de cada día humanice nuestro mundo y sea al mismo tiempo plegaria de alabanza a tu Nombre.
Amén.

CAMPAÑA DE ARBORIZACIÓN



Equipo de Facilitadores
Departamento de Agricultura Sostenible
Medio Ambiente y Agua

La Magia a través de los Arboles es una de las más entrañables y reconfortantes. Tal vez sea porque implica un contacto directo con la naturaleza, porque pone a prueba la sensibilidad y el respeto de quien busca ayuda. Los árboles tienen una presencia especial en la naturaleza; mantienen estrecho vínculo con el elemento tierra y poseen una entidad propia que han conseguido gracias a sus largos años de permanencia de comunión con la tierra. Son criaturas vivas que comen, beben, respiran y descansan. Con el tiempo, cada uno se ha forjado una personalidad definida, por ello todas las partes de un árbol proveen ayuda al ser humano, desde sus hojas hasta sus flores, sus frutos, su corteza o su tronco.
En tal sentido las campañas de arbolización de la comunidad puede marcar una diferencia en nuestras vidas ya que todos podemos hacer contribución personal ya que se logra establecer una relación entre el árbol y quien lo siembra, cuida y cultiva, es decir se establece una relación que debe ser muy respetuosa. Si necesitas una rama, no puedes arrancársela sin más; tienes que cortarla de manera que no dañes el árbol, si lo tratas con crueldad, su magia nunca será efectiva. Incluso puedes corresponder a su amabilidad, al permitir que tomes una parte de él con un pequeño obsequio como abono o simplemente, colocar algunas ramas secas en su base para que con el tiempo se vuelva fertilizante.
Los arboles, el bosques, ayudan a resolver muchos problemas de la comunidad por ello es que son los bienes mayores en las comunidades, ya que ellos trabajan las 24 horas todos los días para mejorar nuestro ambiente y nuestra calidad de vida.
Sin árboles, las comunidades serian un paisaje estéril y hace a las comunidades habitables ya que añaden belleza y crean un ambiente beneficioso para nuestra salud mental, dan carácter a las comunidades, nos proveen colores, flores, bellas formas y texturas. Los árboles impactan profundamente nuestro estado de ánimo y emociones, proveyendo beneficios sicológicos inconmensurables, crean sentimientos de relajación y bienestar, un bosques de una manzana, produce el oxigeno suficiente para 15 personas. Los árboles y otras plantas fabrican su propio alimento del bióxido de carbono (C02) en la atmósfera, el agua, la luz solar y en una pequeña cantidad de elementos del suelo. En ese proceso los árboles liberan el oxígeno (02) para nosotros respirar.
Los arboles, producen materia orgánica en la superficie del suelo al arrojar sus hojas, sus raíces aumentan la permeabilidad del terreno. Esto resulta en la reducción de la corriente del agua de tormentas sobre la superficie del suelo; reducción de la erosión del suelo y de la sedimentación en los arroyos y aumentado la carga de agua en el terreno, reducción de la erosión del terreno causada por el viento, etc.
Los árboles colocados estratégicamente pueden ser tan efectivos como cualquier otra mejora para conservar energía en los hogares de las familias, ya que proveen la energía para refrescar los días de los meses más calurosos y durante la lluvia facilita el calor necesario para la vida, etc.
Pudiéramos seguir enumerando las infinitas bondades de los arboles, por ello como departamento de Agricultura Sostenible Medio Ambiente y Agua, de la Vicaria Episcopal de Promoción Humana caritas, en coordinación con la Fuerza Armada, Municipalidades y las comunidades, ha desarrollado campañas de arborización en las comunidades de Araditas y Amayo del municipio de El Paisnal, El Mecate y Hacienda Tacachico en el Municipio de Quezaltepeque y en las comunidades El Transito y el Transito II del Municipio de de Tonacatepeque realizaron el esfuerzo para trabajar cooperativamente en la campaña de arborización que beneficiara y dará vida algunas áreas sociales, áreas de reserva natural y recreativas  de dichas comunidades, estas campañas de arborización darán vida en el futuro algunas micro cuencas de las comunidades y que permitirá a un futuro alimentar esta fuente de agua y con ello favoreciendo al microclima  de las comunidades y con ello mejorando la calidad de vida de sus habitantes.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Experiencias de Especies Menores


Crianza de Cabras


Equipo de Facilitadores Técnicos

La Vicaría Episcopal de Promoción Humana-Caritas; a través del Departamento de Agricultura Sostenible, Medio Ambiente y Agua, ha venido procesos de seguridad y soberanía alimentaria y nutricional en parroquia y comunidades de la Arquidiócesis de san salvador, con el objetivo de garantizar el acceso, disponibilidad y calidad de la alimentación de familias de escasos recursos económicos

Para ello, se ha promovido y establecido experiencia de especies caprinas junto a un grupo de familias de las comunidades de Tecoluco, en san Pedro Perulapan, Delicias en santa Cruz Michapa, San Pedro Loma Alta, san Juan Opico, en el Transito I y II, de Tonacatepeque, Las Ventanas de El Paisnal, etc.,  a quienes se le ha entregado pie de cría de cabras con la finalidad de garantizar el acceso a la leche para sus grupos familiares, así como para la producción de carne y el intercambio o venta de pie de cría y con ello garantizar el acceso a una alimentación adecuada.

Unas 120 familias han sido beneficiada y han ido mejorando su alimentación ya que consumen leche de cabra y sus derivados ha permitido mejorar la salud de personas de los sus grupos familiares, debido a que posee más nutrientes que la leche vaca. A cada familia se le garantizar la entrega de un pie de cría en estado de gestación a si como el seguimiento técnico a través de un facilitador quién dará servicios profesionales sobre el manejo, alimentación, etc., así como en el establecimiento de banco de forraje, manejo proxilactico, ect. Y las familias se comprometen a garantizar la elaboración del aprisco, asi como a garantizar la alimentación de la cabras a través de la implementación de bancos proteicos; leucaena, gandul, morera, ramio, madre cacao, nacedero, pasto suazi, etc. a su vez se partir del conocimiento y la experiencia campesina que ayude a lograr producción sus alimentos de forma variada y con la menor dependencia de insumos o ayuda externa, considerando importante trabajar fomentando el uso de los recursos locales.

La Crianzas de cabras está orientada a 3 propósitos; producción de leche (hembras), producción de carne (machos) y la reproducción de pie de crías. Dando la oportunidad para que a través de la leche de cabra se complemente la alimentación y dieta balanceada de los menores, con los innumerables beneficios en el crecimiento y desarrollo de los más pequeños, de otra parte la carne que proporciona este animal es comercializable, al tiempo que su valor proteico es esencial para el buen desarrollo y formación del organismo humano.

El proceso para el establecimiento de la experiencia se definen en la siguiente etapa,  sensibilización y motivación, en la que se da a conocer las bondades de las cabras a través de experiencias caprinas y así motivar a los/as beneficiarios/as; a través de giras de intercambios de experiencias de familias campesinas, foro cine de experiencias caprinas y taller de capacitación sobre las bondades de las cabras, recordemos que el desarrollo comienza más bien a través de la motivación, entusiasmo y convencimiento.  Planificación de la Experiencias, en la que se priorizar los recursos locales y así planificar la implementación de la experiencia con el objetivo de hacer uso de los recursos locales (terrenos, materiales, pastos forrajes, recurso humano, etc.), luego se planifica para la implementación de la experiencia.  Capacitación con la finalidad de dar a conocer a las familias motivadas el manejo caprino a través de la realización de una serie de capacitaciones en cuanto al manejo caprino para que en un futuro no lejano cada familia beneficiada pueda disponer de 3 cabras mejoradas genéticamente, para poder mejorar su alimentación e ingresos familiares por medio de consumo y venta de leche de cabra.

Las familias interesadas en el establecimiento de esta experiencias deben asistir a todos los talleres de capacitación, ya que es de suma importancia para poder realizar un manejo adecuado a su modulo caprino, al faltar un taller se depura por si solo del proceso y el compromiso es poner en prácticas las técnicas sobre el establecimiento de la granja, construcción del aprisco, establecimiento del área de forraje y el manejo de las cabras. Implementación de la experiencia y seguimiento del manejo, las familias logran establecer sus experiencias de cría de cabras lechera, dando seguimiento técnico; para ello las las familias interesadas deben de tener establecido su propio banco forrajero, construir el aprisco con materiales locales, como; horcones, madera rolliza, bambú, tejas, etc.  Que allá participado en todos los talleres de capacitación y se compromete a entregar la primera cría hembra a la institución para que otra familia sea beneficiada, por tal razón hay que firmar un convenio, para tener bien definido lo que se va a comprometer la institución y la familia beneficiaria, luego se procederá a la entrega del pie de cría y botiquín veterinario.
Se realizaran visitas de asesoramiento técnico en las 4 etapas del proceso; sensibilización y motivación, priorización y planificación, capacitación e implementación y seguimiento del proyecto.







lunes, 10 de septiembre de 2012

Semillas criollas. Herencia y fruto


Facilitador Técnico
Saúl A. Hernández Ordoñez

Hace ya unos meses en una gira de intercambio de experiencia a Nicaragua sobre la experiencia de casa de semillas (bancos de semilla), logre intercambiar opiniones, conocimiento y experiencias con unos agricultores.; en el cual logre identificar sus parcelas agrícolas le han dado grandes satisfacciones. En algunos puntos desacordamos pues nuestras visiones como todo en la vida son diferentes, pero quedamos de acuerdo en: la calidad de los elementos en el cultivo y si, es ahí donde las semillas entran en juego.
En el establecimiento de una parcela agrícola, a la familia campesina  le surge la pregunta ¿Cómo le voy a hacer? Sin duda el terreno es una pieza esencial, la fertilidad del suelo, la diversificación de cultivos, el agua y las semillas, gracias a ellas se empieza a definir que área de cultivo, el manejo que se le dará, etc.
En cuanto a las semillas, es importante saber de donde provienen, como es su germinación, desarrollo, como fue tratada, cual es su producción, etc. ya que se busca que sea de buena que los costos de producción no sean altos, buena producción y sobre todo que la calidad se la adecuada para la alimentación familiar. Si la semilla no es adaptada a la zona, si es pobre genética y su requerimiento se manejo son alto, difícilmente se podrá obtener buenos resultados.

En El Salvador tenemos formas de conseguir semillas a través del gobierno; las agencias de extensión del ministerio de agricultura, las agencias de cooperación, agro servicios, ONGs e Iglesias, esto traído consecuencias negativas como Perdida de nuestra semilla criolla, perdida del conocimiento de la naturaleza, dependencia y conformismo, individualismo y competencia, visión inmediata; para ya, para ahora, perdida de la costumbre de compartir, perdida de la autoestima campesina, paternalismo y asistencialismo, etc.
 
En tal sentido la Vicaría Episcopal de Promoción Humana-Caritas; a través del Departamento de Agricultura Sostenible, Medio Ambiente y Agua, ha venido impulsando el rescate, manejo y mejoramiento de semillas criollas de maíz, frijol, etc. y con ello rescate la identidad cultural, mejores producción y mejor calidad de los alimentos para las familias campesinas.


Este proceso lo hemos podido realizar gracias a la solidaridad de Caritas Suecia, que a través de su financiamiento, ha ayudado a fortalecer el impulso de la agricultura sostenible en cuanto a la implementación de experiencia de producción de semillas criollas ya que se logro establecer el establecido 50 manzanas de maíz criollo de las variedades; Santa Rosa, Capulín, Tabero, Nicaragüense, Maison y Tapón de botella, etc. y 40 manzanas de frijol criollo de las variedades; San Nicolás, San Andrés, Sangre de toro y segoviano, en los municipios de San Juan Opico, Quezaltepeque, El Paisnal y Guazapa; y Rosario de Mora con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria, así como el de realizar el proceso de selección de semillas que logre garantizar las siembras en el próximo ciclo productivo de las familias, así como el intercambio de semillas a otras familias de otras comunidades.


Con el objetivo de mejorar la soberanía y seguridad alimentaria y así su vez logra establecer  CASAS COMUNITARIAS DE SEMILLAS CRIOLLAS con la finalidad que las familias campesinas, tengan garantizadas las semillas para la siembra, así como para el intercambio y entrega de semillas a otras familias y con ello generar un proceso se solidaridad, promoción y difusión de las semillas criollas y las casas de semillas como una estratégica para preservar el material genético y con ello fortalecer el proceso de selección y mejoramiento de semillas en las parcelas productivas.
Las CASAS COMUNITARIAS DE SEMILLAS CRIOLLAS se establecerán con las semillas que las familias campesinas ha producción y con la motivación para que estas sean compartidas con los agricultores de su comunidad y con otras que tienen un trabajo en esta misma línea, promoviendo las redes de productores para que en momentos de emergencia y la pérdida de materiales genéticos estos puedan apoyarse de una zona a otra.

La ejecución del este proceso se ha venido desarrollando de manera coordinada entre las Familias beneficiadas, quienes deben de implementar las experiencia de semillas criollas con la asesoría técnicas de los facilitadores técnicos, así como  participar en las diferentes acciones que se haya planteado en el convenio,, los Agentes de Pastoral de la Tierra, quienes son responsables de selección,  motivar, animar a las familias beneficiarias con el objetivo de dar respuesta a las familias que más vulnerables en el acceso a alimentos; así también son los responsables de la coordinación con los facilitadores técnico, para coordinar las visitas de seguimiento e implementación de las experiencias, etc. y los Facilitadores técnico de la Vicaria de Promoción Humana Caritas, responsables de la ejecución del proyecto,  así como facilitar el proceso de capacitación, seguimiento en la implementación de las experiencias productivas.

Con este proceso, las familias se siente segura ya que se está garantizando las seguridad y soberanía alimentaria de sus familias y de las comunidades, tal como lo expresa los testimonios de Don Pedro Tejada “ Tenemos una bendición de DIOS y una gran garantía como campesinos al tener nuestras propias semillas criollas ya que es nuestro patrimonio y cultura, estas variedades que tenemos rescatadas en nuestra zona son bien agradecidas ya que nos dan buenos rendimientos, aseguramos la alimentación a nuestras familias y tenemos el material genético para la siembra del siguiente año, no estamos esperanzados a los paquetes agrícolas que dona el gobierno, que lo que resulta en las comunidades, por la selección de familias a beneficiar y luego al recoger los paquetes en los centros de acopio son diversos conflictos” y de Don Cruz Rivera “Satisfechos y contentos al producir con nuestra propia semilla, al aprender a elaborara y aplicar insumos orgánicos, en capacitaciones mas practicas aprender haciendo, esto nos lleva como campesinos en un buen camino ha ser menos dependientes de los agro servicios”